El éxito se logra cuando superamos nuestros miedos: Gladis Victoria.

El éxito se logra cuando superamos nuestros miedos: Gladis Victoria.

Hace 13 o 14 años era una contadora de profesión llena de enfermedades, con altos niveles de estrés y sobre peso. Hasta que tome la decisión de hacer un proceso de transformación y dejar de ser empleada para convertirme en la líder de mis propios negocios e ideas.

Soy Gladis Victoria, una peruana que durante toda su vida fue educada con la convicción de estudiar una carrera para poder tener asegurada una pensión para los años de retiro, así me convertí en una contadora que trabajaba para un colegio privado; que debido al mismo estilo de vida que llevaba poco a poco fui enfermando de gastritis, aumenté de peso y me mantenía con altos niveles de estrés, a tal punto que el Dr. tuvo que restringir varios alimentos de mi dieta, entre ellos el café. 

Por ese tiempo tengo mis primeros acercamientos con la industria de redes de mercadeo. Rosa Luz me invita a probar los beneficios del café, al inicio la intento convencer que no puedo por mis enfermedades y ella me hace saber de los buenos efectos que puede tener en mí una fórmula con ganoderma. Desde los primeros días, mi cuerpo comenzó a experimentar grandes cambios y a las pocas semanas mi estado de ánimo había cambiado por completo, a tal nivel que mis compañeros de oficina también lo percibían. 

Es así como le muestro el producto a Silvia, ella desde el primer día ve los resultados y me contacta para poder comprar más para su consumo y el de su familia. Debido a mi mentalidad, directo la refiero con Rosa Luz. Así comienzo a presentarle el producto y regalar sobres a compañeros, amigos y hasta padres de familia del colegio, ellos al ver los resultados vuelven a contactarme y yo los mando con Rosa Luz. Durante mucho tiempo, nunca hago el impulso por comenzar mi red, cegada por mi falta de tiempo o que no es para lo que me preparó mi carrera. Silvia sí se atreve y comienza su negocio. 

Un día, me intereso en saber como funcionaba después de haber referido a tantas personas con ellas, mi sorpresa fue cuando ellas me comentan que a todas mis referencias las habían registrado bajo mi código el cual para ese momento había generado como $100 de comisión. En esa época era una gran cantidad de negocios. Comienza a nacer en mí la espinita, que al poco tiempo dejo perder de nuevo.  

De empleada a auto empleada y luego emprendedora.  

Tengo una hija, hoy ella tiene 20 años. Para mí poder brindarle estabilidad y una educación siempre fue prioridad. Cuando en mi trabajo se comienzan a generar problemas debido a la mala coordinación entre el comité de socios, me di cuenta que no podía seguir allí. Para esos mismos años, mi madre es diagnosticada con diabetes. Parte de la receta de su Doctor, fue continuar con una vida haciendo lo que le gusta a ella, es así como decidimos crear un restaurante. En ese momento más que nunca, me repetía que no tenía de donde sacar tiempo para poder aceptar la Oportunidad de Negocios que me ofrecían. Pero, siempre estuve comprando producto para mi consumo, el de mi familia y cuando me buscaban vendía por unidad. 

El restaurante comienza a tener muy buenos resultados, hasta que nos intentan subir la renta nos movemos a otro lugar, pero no vuelve a ser lo mismo. Así mi madre desiste, cerramos el restaurante y ella toma la decisión de regresar a su natal provincia. 

En el transcurso de todos estos años, la empresa evoluciona a grandes pasos. Es así como en noviembre del año pasado tomo la decisión de dedicarme de lleno a crear mi equipo. Al no encontrar a mi líder llego a un nuevo equipo, el cual me capacita y me saca de mi zona de confort para poder convertirme en líder. 

Si bien, los resultados económicos son significativos, yo llevo en el alma la necesidad de ayudar a otras personas y además la paciencia para enseñar de la forma que sea necesaria para que cada integrante de mi equipo se capacite y triunfe. 

Ahora, estoy llena de sueños entre ellos el poder tener una casa propia y un legado que dejarle a mi hija y mi familia. Y sobre todo apoyarla en darle la carrera universitaria que ella quiera. 

Por muchos años mi padre y hermanos no confiaban cuando yo les hablaba de dejar mi carrera para poder emprender. Con el tiempo me dieron la razón, ahora junto a mis hermanos ya contamos con las acreditaciones de nuestra empresa de multiservicios. 

Hoy soy testigo andante de que las empresas de redes de mercadeo son para transformar vidas y pensamientos. Yo cambié y mejoré la mía por completo. ¿Quieres cambiar y cumplir tus metas? Haz clic en el botón de abajo.